¿Puede el Rey tener cien sucesores?

¿Puede el Rey tener cien sucesores?

Sí, puede. Hay más de cien personas con alguna posibilidad de suceder a Juan Carlos I en el trono de España. Si la cifra te parece chocante, no vas por mal camino. “La Constitución regula bastante mal la sucesión. Se ha trasplantado como se hacía en el siglo XIX”, ha opinado el catedrático de Derecho constitucional de la UNED Antonio Torres del Moral, quien hoy participa en el curso ‘¿Qué futuro tiene la Monarquía y el Estado autonómico en España?’. Y no es la única regulación que precisa una revisión. “El Príncipe está sustituyendo al Rey por costumbre, pero no hay una norma que lo cubra”. Tampoco hay una ley que regule la abdicación y la renuncia.

Parece que la reforma de la carta magna es solo una cuestión de tiempo, pero la manera en la que debería hacerse no está tan clara como su necesidad. De hecho, a la luz de las estadísticas, parece que existe “un temor a reformar la Constitución”. Mientras que Alemania ha efectuado sesenta reformas y Francia, casi una veintena, en España solo han salido adelante “dos minirreformas de tapadillo, hechas en verano”.

Por eso la ponencia de esta mañana de Torres del Moral, quien también es director del curso, es muy interesante. Bajo el título ‘Sucesión en la Corona, abdicaciones y renuncia’, el catedrático tocará los temas fundamentales para entender un complejo proceso de cambio. Más complicado aún cuando la ciudadanía asiste perpleja al relato que los medios de comunicación ofrecen sobre las conductas poco edificantes de algunos miembros de la Casa Real.

“Antes las monarquías y las familias reales eran intocables, ahora se los discute con razón porque el principio democrático está por encima del monárquico”, ha reflexionado el catedrático. Y la Constitución no debería quedarse atrás. El catedrático ha desarrollado los puntos claves de la reforma. Uno de ellos es la necesidad de reformar el apartado de la sucesión para incrementar la igualdad entre los hombres y las mujeres. También es preciso redactar un estatuto jurídico del Príncipe de Asturias, puesto que no hay una ley que regule su papel como sustituto del Rey.

Torres del Moral también ha propuesto que se redacte una ley que regule la abdicación y la renuncia, la cual permanece inexplicablemente sin escribir. También ha señalado al necesidad de que el jefe del Estado se someta a los principios de transparencia y de que la Constitución aborde la posibilidad de los divorcios en la familia real, en consonancia con la realidad social.

Los cambios en la institución de la corona son más operativos que ideológicos, así que no deberían requerir grandes debates. Pero es posible que ya se hayan retrasado demasiado. “La Constitución Española ha envejecido mucho”, ha asegurado Torres del Moral. Quizá necesite un cambio de aires para prevenir nuevos achaques.

 

Andrés Masa
Curso: ¿Qué futuro tiene la Monarquía y el Estado autonómico en España?
Sede: Motril